No te pierdas esto

Ingresa tu e-mail para recibir actualizaciones: (Recomendado)

Últimos comentarios

Están Online

viernes, 24 de abril de 2009

Te hallas en Primera Línea del pensamiento - 'Pide y se te dará'



7 Te hallas en Primera Línea del pensamiento

Nosotros solemos referirnos al lugar donde te hallas como la Primera Línea del pensamiento, porque ahí, en tu cuerpo físico, en tu medio físico, mientras vives tu experiencia física, constituyes la extensión más alejada de lo que somos nosotros.

Todo lo que ha ocurrido antes ha culminado en lo que eres ahora. Y al igual que toda tu experiencia, desde el momento de tu nacimiento en tu cuerpo físico hasta ahora, ha culminado en lo que eres ahora, todo cuanto ha sido experimentado por Todo Cuanto Existe ha culminado en todo lo que ahora es experimentado en la experiencia vital física del planeta Tierra.

Puesto que toda persona en vuestro planeta tiene experiencias que hacen que sus deseos cobren vida, se está produciendo una especie de invocación colectiva, la cual equivale literalmente a la evolución de vuestro planeta. Así, cuanto más interactuáis, más preferencias personales se emiten y se identifican..., y cuantas más preferencias personales se emiten, más son atendidas. Por consiguiente, ante ti fluye una potente Corriente de la Fuente de Energía desde la cual son recibidas tus preferencias personales e individuales. Es decir, puesto que tantos han vivido y viven, y debido al poder de invocación de tantos de sus deseos, el Bienestar de tu futura experiencia está bien asegurada. Asimismo, tus deseos actuales generarán, al cabo del tiempo, una Corriente de Energía de la que se beneficiarán las generaciones venideras.

Si puedes desearlo, el Universo puede producirlo

Si tu implicación en tu realidad tiempo-espacio te inspira un sincero deseo, el Universo posee los medios de producir el resultado que solicitas. Como quiera que tu capacidad de pedir más se expande con cada logro producido anteriormente, tal vez esta expansión parezca asombrosa a quienes acaban de comprender su poder, pero normal a quienes hace tiempo que la han comprendido y esperan que el Bienestar fluya de manera constante a través de su experiencia.

La Corriente de Bienestar fluye aunque tú no te percates de ello, pero cuando te alineas de manera con ese flujo, tus esfuerzos creativos resultan infinitamente más satisfactorios, porque descubres que no existe nada que desees que no puedas alcanzar.

Aunque no lo comprendas, funciona

No es preciso que comprendas todas las complejidades de este medio que se expande continuamente para cosechar los beneficios de aquello en lo que se ha convertido, pero es necesario que halles la forma de alinearte con la Corriente de Bienestar que se extiende ante ti. Por tanto, en ese esfuerzo, te ofrecemos estas palabras: Sólo existe una Corriente de Bienestar. Puedes aceptarla o resistirte a ella, pero seguirá fluyendo.

Nadie entraría en una habitación brillantemente iluminada buscando el «interruptor de la oscuridad». Dicho de otro modo, no esperaría encontrar un interruptor que inundara la habitación con una gélida oscuridad para ocultar el resplandor de la luz, sino que buscaría un interruptor que opusiera resistencia a la luz, pues en la ausencia de luz se produce oscuridad. Asimismo, no existe una Fuente del «mal», pero puede existir una resistencia a lo que tú consideras el Bien, al igual que no existe una Fuente de enfermedades, pero puede existir una resistencia al Bienestar natural.

Si no preguntas, no obtendrás respuesta

A veces las personas felicitan a Esther por su capacidad de recibir los conocimientos de Abraham y traducirlos en palabras escritas o habladas para que otros las experimenten y se beneficien de ellas, y nosotros deseamos añadir también nuestra felicitación. Pero al mismo tiempo deseamos aclarar que el hecho de que Esther reciba y traduzca nuestras vibraciones es sólo una parte de la ecuación. Sin las preguntas que las preceden, no existirían respuestas.

Las personas de vuestra época os beneficiáis extraordinariamente de las experiencias de las generaciones que os precedieron, pues el proceso de invocar a la Fuente se produjo a través de las experiencias que vivieron y los deseos que éstas generaron. Hoy en día sois vosotros quienes os halláis en Primera Línea para cosechar los beneficios de lo que las generaciones anteriores pidieron. Al mismo tiempo, seguís pidiendo e invocando a la Fuente... y así sucesivamente. De lo que se deduce que si halláis la forma de permitirlo, se producirá un torrente de Bienestar que estará al alcance de vuestra mano y os ofrecerá ingentes beneficios siempre y cuando estéis alineados con él. (Ahora quizá comprendas que, puesto que no suele congregarse una multitud en Primera Línea, no puedes hablar de esto con muchas personas.)

Hoy en día algunas personas experimentan intensas desgracias y traumas y debido a cómo viven en estos momentos sus peticiones ocupan un lugar intenso y preponderante. Y debido a la intensidad de sus peticiones, la Fuente responde también con intensidad. Y aunque por lo general la persona que formula las peticiones está tan inmersa en su trauma que no recibe personalmente los beneficios de lo que pide, las generaciones venideras —e incluso las generaciones presentes que en estos momentos no los rechacen— recibirán los beneficios de esas peticiones.

Te ofrecemos este consejo para ayudarte a comprender: Existe una Corriente ilimitada de Bienestar y una abundancia de toda suerte de cosas que están en todo momento al alcance de tu mano, pero debes alinearte con ellas para recibirlas. No puedes resistirte a ellas y al mismo tiempo recibirlas.

Abre las compuertas y deja que penetre
tu Corriente de Bienestar

Trata de verte a ti mismo, en estos momentos, como el beneficiario de la poderosa Corriente de Bienestar. Trata de imaginar que te deleitas en el flujo de esta poderosa corriente. Trata de sentir que eres el beneficiario idóneo de este flujo ilimitado, sonríe y trata de aceptar que eres digno de él.

Tu capacidad de creerte digno de esta poderosa Corriente de Bienestar depende invariablemente de lo que sucede en estos momentos en tu vida. En ciertas circunstancias te sientes bendecido, en otras menos. Nosotros deseamos que, al leer este libro, comprendas que la medida en que te sientes bendecido y confías en recibir cosas buenas indica el grado de tu disposición de «permitir»; y la medida en que no te sientes bendecido y no esperas que te ocurran cosas buenas, indica el grado de tu resistencia. Nuestro deseo es que, mientras sigas leyendo, te sientas capaz de despojarte de cualquier hábito o pensamiento que te lleve a rechazar la Corriente de Bienestar.

Queremos que comprendas que de no ser por los pensamientos de resistencia que has adquirido a lo largo de tu trayectoria física, que no forman una armonía vibratoria con la Corriente de Bienestar, en estos momentos recibirías todos los beneficios de esa Corriente, pues eres una extensión de ella.

Sólo depende de ti (y de cómo te sientas) el que aceptes o rechaces tu legado de Bienestar. Aunque las personas que te rodean pueden influir más o menos en ti, el hecho de permitir o impedir que ese Bienestar fluya a través de ti depende en última instancia de ti. Puedes abrir las compuertas y dejar que penetre la Corriente de tu Bienestar o puedes optar por pensamientos que te impidan recibir lo que te pertenece por derecho propio. Pero al margen de que lo permitas o te resistas, esa corriente fluye constantemente hacia ti, infalible, incansable, siempre dispuesta a que la recibas.

Estás en el punto ideal para llegar allí desde aquí

Nada tiene que cambiar en tu medio o en las circunstancias que te rodean para que empieces a permitir deliberadamente tu conexión con la Corriente de Bienestar. Aunque te encuentres en prisión, te hayan diagnosticado una enfermedad terminal, estés a punto de arruinarte o en medio de un divorcio, estás en el punto ideal para comenzar ahora mismo. Deseamos también que comprendas que esto no requiere mucho tiempo, tan sólo un conocimiento básico de las leyes del Universo y la determinación de seguir avanzando hacia un estado de «permitir».

Cuando conduces un vehículo de un lugar a otro eres consciente de tu punto de partida y del de destino. Entiendes que no puedes llegar allí al instante; que debes recorrer esa distancia y que, al cabo de un tiempo, llegarás. Y por más que estés impaciente por llegar, y quizá cansado del viaje, no te desanimas hasta el punto de dar media vuelta a mitad del trayecto y regresar al punto de partida. No avanzas y retrocedes reiteradamente desde el punto de partida hasta la mitad del trayecto hasta quedar agotado por el interminable viaje.

No confiesas tu incapacidad de llevar a cabo tu viaje. Aceptas la distancia que media entre tu punto de partida y el lugar que deseas alcanzar, y sigues avanzando hacia tu destino. Entiendes lo que debes hacer. Pues bien, nosotros queremos que sepas que el trayecto entre donde te encuentras y donde deseas estar —en todos los aspectos— es tan fácilmente comprensible como el ejemplo que te proponemos.

Artículos relacionados


0 comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores


Blogalaxia


Add to Technorati Favorites
BlogESfera Directorio de Blogs Hispanos - Agrega tu Blog
 

Mejorar la autoestima | Autoayuda | Psicologos en chile | Superar la depresión. 2009, Santiago, Chile.